Oda a destiempo
¿Para quién escribo? Sin dudas y en primer lugar para mí. Soy la desmemoriada que necesita asentar sus fantasías. ¿Y? Y el fin anunciado se cumpliría siempre en estío. Temo más dejar de amar.
Amor a los padres, amor a los hijos, amor al cónyuge, amor a sí mismo, amor al saber. "El acto fundante de la elección es el poder de seducción de la afinidad y su condena."*
"¿Este mundo qué nadie sabe qué es, qué significa, a dónde llega, con quienes conecta ni menos se comunica?"*
sin embargo se cuela la sensación
no sólo fuera de sí
también fuera de él
autobombo, la máquina
desarmada incorpora fluido
Lío atado, vida de primavera, nudo desatado
una vez por un miedo
dónde ni tú ni yo tuvimos
nada que ver
Lo que ves esta vez, veraz.
¿Por qué la acción ha de ser el punto, la clave?
Ciertas madureces en lides del cerebro, mente y sentimiento
en intercambios pacientes y plácidos de sentido esperan la muerte
En la época del desengaño no hay necesidades urgentes
no hay necesidades
Cubierta, resguardada, sin presagios oscuros
la pradera luce amarilla y la cosecha va siendo
La segadora origina fardos desperdigados
en campo sin dueño, sustituyendo la piedra dura
Antes del declive recorrido pensamiento de pies a cabeza en inspección final descubre
Un mundo despojado, no trataría de un despojo tampoco da para exagerar, un mundo
Un espacio íntimo, posible timo aún más por estar en vivencia
Al espacio lo define una estructura invisible y limitada en una interacción abierta y cerrada.
El espacio acepta, remoción, aireación, disgregación
Intersticio, en derramado cuásar, atosiga testigo en candente transmisión.
La consumación, hoguera, pide término y el rescoldo, testigo último, humea queriendo abrigo
¿Qué temo más, dejar de amar o seguir amando?
Nunca hay elección posible pero ¿por qué me siento en el encuentro? Bajo el árbol, sin murallón donde la mirada sin cautela atraviesa la densidad, la diferencia, la vergüenza de la apariencia.
"Amor líquido" de Bauman.
una vez por un miedo
dónde ni tú ni yo tuvimos
nada que ver
Lo que ves esta vez, veraz.
¿Por qué la acción ha de ser el punto, la clave?
Ciertas madureces en lides del cerebro, mente y sentimiento
en intercambios pacientes y plácidos de sentido esperan la muerte
En la época del desengaño no hay necesidades urgentes
no hay necesidades
Cubierta, resguardada, sin presagios oscuros
la pradera luce amarilla y la cosecha va siendo
La segadora origina fardos desperdigados
en campo sin dueño, sustituyendo la piedra dura
Antes del declive recorrido pensamiento de pies a cabeza en inspección final descubre
Un mundo despojado, no trataría de un despojo tampoco da para exagerar, un mundo
Un espacio íntimo, posible timo aún más por estar en vivencia
Al espacio lo define una estructura invisible y limitada en una interacción abierta y cerrada.
El espacio acepta, remoción, aireación, disgregación
Intersticio, en derramado cuásar, atosiga testigo en candente transmisión.
La consumación, hoguera, pide término y el rescoldo, testigo último, humea queriendo abrigo
¿Qué temo más, dejar de amar o seguir amando?
Nunca hay elección posible pero ¿por qué me siento en el encuentro? Bajo el árbol, sin murallón donde la mirada sin cautela atraviesa la densidad, la diferencia, la vergüenza de la apariencia.
"Amor líquido" de Bauman.
No hay comentarios:
Publicar un comentario